Puede que nos acordemos cada mes de febrero por el día 14, el de San Valentín, pero unos días antes, exactamente el 11, se conmemora el Día de la Mujer y de la Niña en la Ciencia.
¿Pero por qué se celebra este día cada 11 de febrero? Así lo dispuso la Asamblea General de las Naciones Unidas que decidió designar este día para reconocer la trayectoria de todas aquellas mujeres que han contribuido al avance de la ciencia y la tecnología.
Fomentar la igualdad de género y las oportunidades de las niñas que desde las escuelas demuestran su vocación hacia esta actividad tan noble es algo fundamental tanto para Naciones Unidas como para todas las organizaciones y países que luchan por incrementar su participación y su presupuesto en el desarrollo de avances científicos, es fomentar la igualdad de género . Destacar sus logros y ampliar sus horizontes sirven para continuar con el empoderamiento que las mujeres y las niñas vienen cultivando incansablemente.
También es importante reconocer que las metas y los objetivos de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible necesitan urgentemente de la incorporación de estas mujeres al mercado laboral y económico. Ellas forman parte del cambio que buscamos ver en el mundo y de su desarrollo sostenible. Su situación de contratación laboral suele ser mucho más débil que la de sus pares científicos hombres. De hecho, ganan un 30% menos y sus carreras no son tan largas como las de éstos. Todo esto debido a su género y a la falta de apoyo tanto de los gobiernos como de las empresas que desarrollan avances científicos.
Una de las cosas positivas que podemos rescatar de la pandemia es la visualización que ha hecho de las mujeres científicas ya sea en canales de televisión explicando con destreza y sentido común lo que estaba pasando, como en el trabajo de laboratorio donde desarrollaban las vacunas. Por primera vez alguna parte del público ha visto que existe la ciencia realizada por mujeres, y que su lugar lo tienen bien ganado.
Pero la lucha es continua. Actualmente el promedio de mujeres que estudian ciencia se ha incrementado, solo en España por ejemplo, no supera el 28% del total de estudiantes. Sigue prevaleciendo la idea de que la ciencia es difícil y son las mismas niñas la que la perciben como inentendible.
Un estudio publicado en el año 2017 en la revista Science sobre la percepción de las ciencias en niñas y niños de entre 4 y 6 años concluyó que a los 4 años no hay diferencias entre sexos. A los 5 años las niñas piensan que las ciencias son más difíciles. A los 6 años, que son más para los niños: comienzan entonces a abandonar la idea de que estas materias son para ellas.
Este prejuicio prevalece con la idea de que es para otras perosnas, para niños y niñas, comienza a resquebrajarse y va dando paso a un sistema educativo y laboral donde cada vez más niñas y mujeres optan por la ciencia.